Gruyère un pueblo de postal con sabor a queso y chocolate
Gruyère es una pequeña ciudad medieval y peatonal situada en un pequeño cerro en el Cantón de Friburgo. Rodeada de montañas que seguramente en esta época del año sus picos ya empiecen a estar nevados. Balcones y ventanas llenos de flores tan bien cuidadas que no parecen reales…pero lo son. Todo es tan perfecto y bonito que parece una postal.
Miles de turistas llegan cada año dispuestos a disfrutar de una escapada y deleitarse del encanto que ofrece este pueblecito .
¿Que ver?
La pequeña ciudad de Gruyère está coronado por su Castillo (uno de los más conocidos de Suiza). En 1938 fue convertido en museo y ofrece a sus visitantes un paseo a través de ocho siglos de arquitectura, de historia y de cultura. Cuenta también con tres museos muy distintos entre ellos.
El más carismático por así decirlo es el Museo H. R. Giger. Un museo poco convencional que contiene la extraordinaria y enfermiza obra de este creador que en 1980 ganó un Oscar a los mejores efectos especiales por Alien. Lugar de peregrinación de los entusiastas de la ciencia ficción. Y sin ir mucho más lejos enfrente mismo del museo se encuentra el H.R. Giger Bar. En el que podréis disfrutar de una copa rodeados de huesos y esculturas orgánicas.
Para los amantes de este peculiar queso tienen visita obligada a la quesería La Maison du Gruyère, cuyo queso de denominación de origen protegida se lleva elaborado desde 1969 de manera tradicional. Y después de este aroma a otro más dulce el del chocolate, visita obligada a “Cailler” la fábrica de chocolate más famosa de Suiza.
Y no podéis iros sin probar la famosa raclette: media barra de queso que se va derritiendo progresivamente por capas. Se raspa con un cuchillo para esparcirlo por encima de patatas pequeñas o pan. Para postres como no podía ser de otra manera una fondue de chocolate, toda una delicia para el paladar.
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