Semana Internacional de la Ciencia y la Paz
La Asamblea General de las Naciones Unidas anunció el 6 de diciembre de 1988, la celebración de la Semana Internacional de la Ciencia y la Paz. Contribuyendo de manera fundamental a fomentar el progreso y la paz en todos los ámbitos. Desde el cambio climático a la salud pública, pasando por la seguridad alimentaria, el saneamiento, el desarme y la preparación para casos de desastre.
De tal manera, que durante esta semana los Estados Miembros y las organizaciones intergubernamentales animan a las universidades y otras instituciones de altos estudios ( academias, institutos científicos, asociaciones de profesionales y miembros de la comunidad científica) a celebrar conferencias, seminarios y diversos actos para promover el estudio. Y además, la transmisión de información a favor de las sociedades. Con el objetivo de poder acabar con la pobreza y contribuir con la paz mundial.
¿Por qué ciencia para la paz?
Hoy en día nuestra generación cuenta con los conocimientos necesarios. Obviamente también cuentan con todos los avances tecnológicos y recursos científicos que disponemos. Para poder contribuir a reducir la pobreza, además de, proteger y mejorar el medioambiente y la calidad de vida de todos los seres humanos. De esta forma lograremos avanzar hacia un futuro sostenible.
También tenemos la responsabilidad de proteger a toda la humanidad. Trabajando en un mundo sin armas nucleares y de igual manera, parar la construcción de otras armas de destrucción masiva.
Todo esto y más lo podemos lograr. Sumando esfuerzos para aprovechar al máximo el potencial de la ciencia a favor del bien común y la paz.
El problema de las armas químicas, la preocupación con el cambio climático, la bajada del paro. La energía atómica y las enfermedades entre otras, son los problemas más relevantes en los que la ciencia puede convertir en paz.
Ciencia y Paz de la mano unidas…